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• ¿Qué nos brinda tener una familia estable?

  Compañia, tiempo de calidez, sentido de pertenencia, empatia, sexualidad, amor en la mayoría de los casos.

• ¿Qué nos brinda tener un trabajo?

  Estabilidad económica, satisfacción personal, un sentido de propósito y en muchas ocasiones la oportunidad de construir equipos y amistades.

• ¿Podemos estar con plenitud en ambos?

  Personalmente considero que si es posible, sin embargo no es nada fácil, nos implica un reto practicamente permanente de organización personal, de toma de decisiones importantes y la apertura a una comunicación asertiva en nuestros equipos de trabajo. Sin duda esa plenitud nunca será permanente y depende mucho de cada historia de vida y contextos de ella.
  ¿Qué implicaciones nos traen los desajustes para todos los que afortunadamente tenemos ambos escenarios sociales? De todo esto escribo en el siguiente artículo, si haz llegado aquí tal vez tengas presente estos dilemas, así que espero pueda aportarte algo con el siguiente artículo.

- Contextos históricos y culturales

Sin duda tanto el mundo laboral como el familiar han cambiando en la historia, me gustaria enlistarte cambios importantes que han marcado hitos:

• Revolución Industrial: Antes, la mayoría de las familias trabajaban juntas en la agricultura o en pequeños oficios. Con la industrialización, las personas comenzaron a trabajar en fábricas, lo que llevó a horarios más rígidos y a una separación entre el trabajo y el hogar.

• Movimientos laborales: A finales del siglo XIX y principios del XX, surgieron movimientos que lucharon por mejores condiciones laborales, incluyendo jornadas más cortas, lo que permitió que las personas tuvieran más tiempo para la familia.

• Cambios sociales: A medida que las mujeres empezaron a ingresar más al mercado laboral en el siglo XX, se planteó la necesidad de equilibrar trabajo y responsabilidades familiares, lo que llevó a debates sobre el rol de género y el trabajo doméstico.

• Tecnología y teletrabajo: En las últimas décadas, el avance tecnológico ha permitido una mayor flexibilidad laboral. Sin embargo, también ha difuminado las líneas entre el trabajo y la vida personal, creando nuevos desafíos para el equilibrio.

• Diversidad en la formación familiar: Hoy en día, existen conceptos de conformación familiar muy diversos: familias nucleares, extendidas, monoparentales, ampliadas y compuestas. Aquí te dejo un link por si te interesa ver las estadísticas oficiales en México hasta el año 2020. La historia de la formación de las familias es muy interesante, te dejo este video por si quieres enriquecerte en este tema.

• Cultura del bienestar: Actualmente, hay un enfoque creciente en el bienestar y la salud mental, lo que resalta la importancia de encontrar un equilibrio que no solo beneficie a la productividad, sino también a la calidad de vida.

- Síntomas de un desequilibrio

Aquí vale la pena enlistar las pérdidas que se van presentando.

En lo familiar

• Desconexión con alguno o algunos de los integrantes.

  Ejemplos, no sabemos como se llaman los amigos de nuestros hijos, qué actividades hace en lo profesional o en lo social nuestra pareja; desconocemos gustos musicales, culturales o deportivos de los nuestros.

• El más obvio, falta de tiempo hacia nuestros familiares.

  Ejemplos: No hay tiempo para acompañar a nuestros hijos a juntas escolares, actividades extracurriculres o deportivas, no hay tiempo para una comida familiar o esta se reduce a tiempos reducidos en fines de semana.

En lo laboral

• Falta de motivación en labores que antes no tenías problema en ejecutar.
• Falta de productividad.
• Falta de puntualidad y/o asistencia.
• Errores básicos en un área de expertis.

En lo personal

• Un cansancio permamente, pese a dormir bien.
• Ataques de estrés y/o ansiedad.
• Depresión.
• Una caida en la salud física en forma gradual.
• Aumento de peso, la alteración a la producción del cortisol por el estrés puede ser una causal.

- Acciones concretas

• Establecer límites:

  Define horarios claros para el trabajo y la familia. Trata de desconectar del trabajo al final del día.

• Planificación por escrito:

  Usa un calendario para organizar tus actividades familiares y laborales. Esto te ayudará a visualizar tu tiempo.

• Priorizar tareas:

  Los números siempre ayudan, haz una lista enumerando la prioridad, de lo más a lo menos importante, tanto en el trabajo como en casa. Haz ejercicios de profundidad (causas y efectos) para definir lo que realmente importa.

• Comunicación:

  Habla con tu familia sobre tus compromisos laborales y escucha sus necesidades. Esto fomentará un entendimiento mutuo, aquí importa la calidad y la cantidad, procura diario establecer diálogos familiares. En lo laboral encuentra espacio para aclarar situaciones como exceso de trabajo, falta de planeación, falta de personal, etc. Siempre en un marco de respeto, recuerda que callar en muchas ocasiones se interpreta como la aceptación de medidas donde no estés de acuerdo. Te invito a ver este video para aprender a decir que 'NO'.

• Usa la tecnología.

  Define en el trabajo si hay tareas repetitivas que puedan ser automatizadas, planteale al equipo de trabajo tu observación, enriqueceras al equipo y pueden encontrar a un proveedor que pueda aportarles una solución. Tu servidor también es coloborador en una empresa de desarrollo de software, te dejo la referencia por si te es de utilidad.

• Pide retro.

  Partiendo de una base constructiva, pide retroalimentación de tu trabajo tanto a jefes como a compañeros, recibe las críticas en forma constructiva, pregúntate si lo puedes hacer mejor y/o en menor tiempo, siempre visualizando el objetivo de salir a tu hora de trabajo.

• Si estás fuerte, puedes aportar.

  Dedicar tiempo a tus intereses y bienestar te hará más efectivo en todas las áreas. Partamos de un equilibrio personal de emociones y salud para poder brindarnos en los profesional y en lo familiar, esto nos debe comprometer a llevar una alimentación saludable y a realizar ejercicio físico. Te recomiendo también tomar alguna actividad recreativa que realmente disfrutes.

- Conclusiones

• El querer nos debe comprometer al poder. Suena fácil, pero la vida no son recetas, cambiar hábitos o incorporarlos lleva su tiempo, es un proceso, pero todo proceso tiene un inicio, solo comienza.

• Ambos mundos son importantes: No debemos descuidar ninguno de ellos, debemos estar atentos de cualquier hábito negativo que estemos desarrollando. Atención plena para una vida plena.